Una tierna historia de amor es la que rodea a Fernando Pastrana y Yamile Ospina, ambos habitantes de la calle que lograron recuperarse y ahora, juntos, lideran procesos de inserción social con personas que se encuentran en esa condición.

Como habitante de la calle, Fernando se dedicaba al reciclaje de basuras y al cuidado de vehículos. Por su parte, Yamile deambulaba sin rumbo alguno.

Así transcurrían los días para ambos hasta que hace aproximadamente dos años fueron recibidos por la Fundación Lugar de encuentro San Francisco de Asís, donde iniciaron un proceso de rehabilitación.

De manera simultánea, Fernando y Yamile recibían atención médica a través de la IPS Lugar de encuentro San Francisco de Asís, que atiende a un gran número de habitantes de la calle y personas en condición de vulnerabilidad.

En la Fundación, a cargo de Monseñor Fray Edgar Rincón Salazar y que trabaja por la restitución de los derechos fundamentales de estas personas, Fernando hizo un curso sobre farmacodependencia, se capacitó como facilitador y hoy lidera procesos con habitantes de la calle.

A Yamile hubo necesidad de tramitarle su identificación, a través de una jornada que realizó la Fundación con el apoyo de la registraduría Nacional del Estado Civil, según recuerda Pilar Ceballos, Gerente de la IPS Lugar de encuentro San Francisco de Asís.

Al igual que Fernando, Yamile también se ha convertido en líder de procesos de inserción social.

Con el paso del tiempo, Cupido los flechó, iniciando así una relación amorosa que este fín de semana los llevó al altar.

Fernando y Yamile contrajeron matrimonio este fin de semana en la capilla del Hospital General de Barranquilla que administra la Fundación a través de Monseñor Frayle Edgar Rincón Salazar.

En esta ceremonia también el padre Fray Ramón Ariza y habitantes de la calle ya recuperados, que ahora son frailes y que integran la orden religiosa Sociedad Católica Anglicana San Francisco de Asís.

También asistieron personas en proceso de rehabilitación y los encargados de la casa de mujeres travestis.

Al final, la celebración fue en la sede de la Fundación, con la organización de sus propios compañeros.

Ahora, Fernando y Yamile tras jurarse amor eterno, vivirán felices en la casa de los frailes y continuarán apoyando la labor de la Fundación para rehabilitar a otras personas.